El fracaso de Tania Brugueras

Por Arthur González.

La reconocida artista cubana Tania Brugueras ha lanzado una nueva provocación contra el gobierno de Cuba, con vistas a crear situaciones que conlleven a medidas legales contra ella, con el respaldo mediático de los medios de prensa de Estados Unidos y de sus autoridades, para calificarla como “víctima del régimen”.

Todo está perfectamente diseñado y en plena concordancia con la actual línea política que sigue el presidente Barack Obama, expuesta, con sinceridad y sin secretos, el 17.12.2014, cuando en su discurso para anunciar el restablecimiento de relaciones diplomáticas con Cuba, dijo:

 

“No me hago ilusiones con respecto a los continuos obstáculos a la libertad que aún enfrenta el ciudadano cubano común. Los Estados Unidos consideran que ningún cubano debe ser víctima de acoso, arresto o golpizas, solo por ejercer el derecho universal de hacer que su voz se escuche. Continuaremos apoyando a la sociedad civil allí”.

Después de ese histórico paso de los Estados Unidos, la mafia anticubana de Miami, reaccionó en su contra pues no aceptan reconocer al Gobierno revolucionario, aunque la nueva estrategia política intente alcanzar sus mismos objetivos; de ahí que contactarán con la artista plástica Tania Bruguera, hija de un revolucionario cubano y multipremiada por la Unión de Escritores y Artistas de Cuba, para ejecutar una gran provocación en la Plaza de la Revolución el 30.12.2014.

Para llevarla a cabo, fue orientada a contactar nuevamente con la devenida en bloguera, Yoani Sánchez Cordero, reclutada en España por el terrorista agente CIA, Carlos Alberto Montaner, para contar con su apoyo mediático en las redes sociales.

Sabían de antemano que las autoridades no le permitirían ejecutar ninguna acción en ese lugar, iniciándose la cruzada de prensa en favor de la provocación y por supuesto de Tania, para recabar apoyo de artistas extranjeros confundidos y desinformados por los medios de prensa estadounidenses.

Ahora de nuevo a la carga, y con suficiente financiamiento de Miami, Tania Brugueras lanza una campaña de recaudación de fondos para abrir próximamente en La Habana el” Instituto de Artivismo Hannah Arendt” (INSTAR), el que tiene como finalidad la “creación de herramientas pacíficas para implementar cambios de política en la Isla y una alfabetización cívica”.

Jugar en casa del trompo para una aprendiz de “disidente” como Tania, es muy difícil y complejo, dada la experiencia acumulada por Cuba durante 57 años, para liquidar provocaciones fomentadas en los Estados Unidos, ninguna de las cuales tuvo resultados, aunque facilitó el enriquecimiento de algunos personajes radicados en la Florida.

A pesar de tener plena conciencia de que se expone a ser atraída a la responsabilidad penal, algo que desea con todas sus fuerzas para transformarse de victimaria en víctima, Tania afirmó a la prensa de Miami que:

“El instituto de arte y activismo que estoy abriendo en La Habana surgió al comprender que mucha de la violencia existente en el mundo se genera a partir del miedo como respuesta a las cosas que no sabes que puedes manejar, que no ves de manera clara”.

El proyecto contrarrevolucionario de ella deja ver los fines perseguidos, y que en nada se relacionan con “ayudar a los cubanos”, pues estos ni se lo han solicitado ni tampoco lo necesitan.

El fin es trastocar una realidad que Estados Unidos no pudo alterar en 57 años, porque a pesar de la guerra económica y cientos de actos terroristas ejecutados por la CIA, el pueblo decidió por el socialismo ante las vicisitudes sufridas en más de medio siglo de capitalismo.

Los sujetos a los que irían dirigidas sus acciones provocativas la propia Tania los enunció, al expresar:

“El Instituto estará enclavado en La Habana Vieja, un lugar donde muchas visiones diferentes sobre Cuba coinciden; tiene a los extranjeros que vienen como turistas con la proyección del país que quieren ver… por eso La Habana Vieja es lugar perfecto…”

Sin proponérselo, Tania desveló sus intenciones, que son las de crear problemas en el centro histórico ante la mirada de turistas extranjeros que lo visitan, para que se lleven una imagen falsa del país, porque estos son los mejores embajadores que tiene la Revolución cubana, al descubrir las mentiras y tergiversaciones que dicen sobre la Isla en el exterior.

Para impregnarle algo de credibilidad a su proyecto, Tania publicó la foto de su licencia como trabajadora no estatal, pero no dio a conocer el objeto de la misma, pues es sabido que en la ley cubana vigente no existe licencia para delinquir contra el sistema, y no es igual portar una licencia para conducir una motocicleta que para un auto y menos para un ómnibus.

Su estratagema es archiconocida por los cubanos que han tenido que lidiar con proyectos de la CIA como la tristemente célebre Operación Peter Pan, los incendios en centros comerciales, escuelas y círculos infantiles, sabotajes contra las industrias, asesinato de diplomáticos, explosiones en consulados y embajadas de Cuba en otros países, y campañas para afectar la imagen de Fidel Castro, diseñadas por especialistas de la CIA en guerra psicológica, hoy desclasificadas.

¿Por qué no abre esa institución en Honduras, México o Guatemala donde se asesinan periodistas, estudiantes y líderes indígenas?

Tania Brugueras y los que la dirigen en Estados Unidos deben comprender que eso es más de lo mismo y no tendrán el menor resultado.

Cuba no es Polonia y menos Checoslovaquia, así que ella podrá gritar hasta el cansancio que los cubanos no le temen a nada ni a nadie y la historia lo ha demostrado, porque como afirmó José Martí:

“El que convence a su enemigo de que no tiene razón, ya lo tiene vencido”.