Lo que dejó Obama como presidente de EE.UU.


Por Arthur Gonzalez, tomado de TeleSur.

Barack Obama ganó la presidencia en 2008 y se convirtió en el primer presidente negro de la historia de los Estados Unidos. Pese a que despertó las esperanzas de los estadounidenses que anhelaban un cambio, son muchos los asuntos nacionales e internacionales que dejó sin resolver.obama-foto

Tras ocho años de Gobierno, Obama deja atrás una herencia presidencial con tantas sombras como luces. Tensiones raciales, déficit de empleos, creciente desigualdad social y la crisis en Medio Oriente, son algunos de los puntos clave que con los que su administración no pudo lidiar del todo bien.

1.Economía

Al asumir el poder en el año 2009, Estados Unidos se encontraba sumido en una crisis financiera, con unos mercados derrumbados, una tasa de paro que llegó a pasar del 10 por ciento y una contracción del PIB que en 2009 alcanzó el 2,7 por ciento.

La administración Obama redujo las cifras de desempleo, situándola de un 7,8 por ciento en enero de 2009 a un 4,9 por ciento en 2016.

Sin embargo, un análisis divulgado por US-CNS sostiene que de la mano de obra que se encuentra disponible, unos 251 millones, solamente 157 millones tienen trabajo, unos 94 millones están desocupados y un 40 por ciento de ellos no está laborando desde hace más de dos años.

Esto se suma a un débil crecimiento económico, el cual, no ha excedido más allá de los 2,5 por ciento anual. Según palabras del reportero político y económico norteamericano, Edmund Kozak, “en términos de crecimiento económico, Barack Obama ha sido uno de los peores presidentes de Estados Unidos”.

Por otra parte, la desigualdad ha crecido durante la gestión de Obama. Los ricos han alcanzado un mayor poder adquisitivo que el país no conocía desde los años ’30 del siglo XX (el 0,1 por ciento más rico poseía en 2013 más del 20 por ciento de la riqueza nacional y en 2014 el 1 por ciento poseía casi la mitad de la riqueza total del país).

En cuanto a la pobreza, la tasa disminuyó modestamente en la “Era Obama”. Para el año 2009, la tasa de pobreza se ubica en 14,3 por ciento. En el año 2015, se descendió al 13,5 por ciento, es decir, hay unos 43 millones de personas pobres en Estados Unidos.

2.Violencia, armas de fuego y tensión racial

El primer Presidente negro de la historia estadounidense deja, irónicamente, escasos avances en la lucha contra el racismo. Desde el 2014 hemos sido testigos de un creciente número de asesinatos de negros a manos de policías blancos.

Las heridas y resentimientos raciales siguen latentes en los Estados Unidos, razón que desató una ola de protestas en todo el país, comenzando en Ferguson, expandiéndose por Baltimore, Nueva York y Charlotte.

De acuerdo con cifras del Proyecto de Trazado de la Violencia Policial, un 40 por ciento de las víctimas asesinadas por policías son de raza negra, mientras que también un 40 por ciento de la población encarcelada es negra, según la californiana Universidad de Stanford.

En cuanto a los ingresos, la desigualdad salarial entre blancos y negros en los Estados Unidos se ha incrementado: mientras que la media de ingreso de una familia blanca era de 58 mil dólares anuales en 2007 y se redujo a 55 mil en 2013, en las familias “no-blancas” esta cifra disminuyó de 41 mil a 34 mil.

Esto se debe principalmente a las diferencias del acceso a los servicios educativos y sanitarios entre negros y blancos, así como a la alta tasa de desempleo y los índices de pobreza de los negros, problemas que no fueron corregidos del todo durante el mandato de Obama.

Otro asunto pendiente que dejó el demócrata fue el control de armas, a pesar de su constante lucha en este sentido.

Estados Unidos es el país con más armas de fuego en el mundo. Obama se encontró con un país que en 2009 registraba 310 millones de armas de fuego y unos 306 millones de habitantes, de acuerdo a las cifras del Congreso.

Obama ofreció en unas 15 comparecencias endurecer las leyes sobre el tema, pero no pudo concretar ninguna acción concreta. En 2016, el Presidente decidió aplicar medidas por la vía ejecutiva, debido a que el Congreso se negó al control de armas. Sigue leyendo