La callada por respuesta

Arthur Gónzalez.

Hace ya casi un mes del golpe de estado en Egipto y el gobierno norteamericano aun no ha decidió que hacer. Recordemos que el pasado 10 de julio la propia Casa Blanca informó oficialmente que…“se tomarían su tiempo para decidir si calificaban lo ocurrido en Egipto como un golpe de estado.”
Cuánta falsedad existe en la política yanqui. Las calles del Cairo y otras importantes ciudades de ese país, se mantienen ocupadas por manifestantes que se oponen al golpe de estado ejecutado por el ejército, bajo las instrucciones de la CIA como han hecho en el resto del mundo, la violencia campea por sí misma y aun no hay una condena del ejecutivo norteamericano, ni de la Comisión de Derechos Humanos y mucho menos del Consejo de Seguridad de la ONU. ¿Por qué esperar tanto? Algo huele a complicidad y aprobación, de lo contrario ya hubiesen formado la alharaca.
Qué diferencia con lo que sucede en Siria, donde para nadie es un secreto fueron los Estado Unidos los que organizaron, entrenan y financian a las tropas mercenarias que combaten contra el gobierno constitucional de ese estado, en total complicidad con sus aliados europeos de la Organización del Atlántico Norte y al no poder vencer, ni lograr un apoyo del pueblo sirio, ahora crean las condiciones para invadirlo, como hicieron con Irak, bajo el falso pretexto de la tenencia de armas químicas.
En Egipto la situación se torna muy peligrosa y se les va de las manos en cualquier momento. La masacre se avizora y el baño de sangre del pueblo dejará un precedente triste en ese país, donde los norteamericanos tendrán una alta cuota de responsabilidad, compartida con el gobierno de Israel, ya que ambos rechazan cualquier gobierno de corte islamita por temor a un cambio político en la zona, a favor de un estado palestino.
Esperemos unos días por los pronunciamientos de la administración de Barack Obama, ellos mismo se encargarán de quitarse la careta y demostrar su participación en los hechos. No nada mejor que un día tras otro.
Desgraciadamente las Naciones Unidas bajo la presión yanqui, tampoco harán nada a favor del pueblo. Como hasta ahora su posición será la callada por respuesta.