Por Arthur González.
Han trascurrido 56 años y en Miami no dejan de soñar con cambios en Cuba; al espera de ellos se fueron de la Isla por seis meses y aun sus pronósticos de la caída del socialismo no se han cumplido.
Al ver el derrumbe del socialismo en Europa, en buena medida por los planes de la CIA bajo el gobierno de Ronald Reagan y su programa Democracia, con la ayuda del Vaticano y el reclutamiento de altos funcionarios y militares de esos países, Miami se apuraba a confeccionar posibles escenarios para cuando le tocara el turno a la Revolución cubana, pero ninguno de ellos dio en el blanco.