Arthur González
“Diario de Cuba”, sitio creado en España para desinformar sobre la realidad cubana, colocó una noticia el 13 de mayo donde expresa que: “La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) decidió mantener las medidas cautelares a las Damas de Blanco, debido a que la «situación de riesgo» se mantiene activa”.¿Riesgo de qué?
Todo es parte de la guerra sicológica contra Cuba para trasladar de forma repetitiva una mentira y convertirla en verdad.
Las llamadas Damas de Blanco, engendro creado y pagado desde Miami, se pasean libremente cada domingo por una de las más céntricas avenidas habaneras sin ser molestadas, más bien se ignoran, a pesar de que la iglesia seleccionada por sus patrocinadores en Estados Unidos, en nada tiene que ver con ellas, pues ninguna es vecina del reparto Miramar.
Por la falta de elementos noticiosos, las más de cien agencias de la prensa extranjera acreditadas en Cuba y las principales misiones diplomáticas, ya no envían a sus funcionarios, corresponsales, fotógrafos o camarógrafos, la razón es la total ausencia de represión por parte de las autoridades. Quien lo dude puede verificarlo directamente en el terreno.
A fin de lograr acciones represivas, el gobierno norteamericano y sus agencias de inteligencia han organizado cientos de provocaciones en las puertas de la iglesia de Santa Rita de Casia, algunas de ellas con la participación de extranjeros que desplegaron sábanas con letreros desafiantes al gobierno, reparten dinero y artículos a las integrantes de las Damas, ruedas de prensa improvisadas y muchas más. Ninguna fue interrumpida por la policía y nadie detenido.
La inculta y grosera Berta Soler, quien tomó el mando de esa pandilla sin convocar a elecciones democráticas y según las quejas de muchas de sus subordinadas se apodera de la mayor parte del dinero que recibe desde Miami y vende muchos de los medios materiales que recibe para obtener beneficios a su favor, vocifera a voz en cuello que es “reprimida, golpeada y amenazada”, pero la realidad es que cada día engrosa más libras a su cuerpo y su musculatura ya compite con la de muchas atletas de lucha, levantamiento de pesas o de judo.
Sin embargo, la CIDH no se pronuncia para nada sobre los miles de mexicanos, hondureños, brasileños, bolivianos, argentinos, colombianos y guatemaltecos que mueren cada día producto de la violencia criminal que persiste en sus países, algo totalmente diferente a la situación de las asalariadas de Washington que se enmascaran tras la cortina creada de las Damas de Blanco.
¿Por qué motivo la CIDH no aplica medidas cautelares a los periodistas latinoamericanos que son asesinados a diario por publicar la galopante corrupción de gobernantes, políticos, militares y altos funcionarios en sus respectivos países?
La Comisión de Investigación de Atentados a Periodistas (CIAP), denuncia anualmente los asesinatos, desapariciones, atentados, agresiones y violaciones a los derechos humanos, durante el ejercicio de su profesión en América Latina.
Claro está, ellos no son ciudadanos de la Cuba socialista, por tanto sus muertes no sirven para campañas propagandísticas y es cero el compromiso de la CIDH por la defensa de sus derechos humanos.
Esta estratagema es la misma que aprobó el presidente Dwright Eisenhower cuando aseguró públicamente:
“Nuestro objetivo en la guerra fría no es conquistar o someter por la fuerza un territorio. Nuestro objetivo es más sutil, más penetrante, más completo, estamos intentando, por medios pacíficos, que el mundo crea la verdad”.
“…los medios que vamos a emplear para extender esa verdad se les suele llamar “guerra psicológica. La guerra psicológica es la lucha por ganar las mentes y las voluntades de los hombres”.
¿Se requiere de más elementos para probar esa manipulación?
La lista es larga y los documentos desclasificados son cientos de miles. Quien lo dude que lea y estudie, después podrá llegar a mejores conclusiones.