Dedico este post para aquellos que desde Miami intentaron presionar a Benedicto XVI para que le diera a los cubanos lecciones de libertad, democracia y derechos humanos, se quedaron con las ganas. En cambio el Sumo Pontífice demostró cual es la línea del Vaticano y recalcó en su homilía el motivo real que persigue con su presencia en la Perla de las Antillas.
En sus palabras el heredero del apóstol Pedro, reconoció el trabajo del Estado cubano hacia la Iglesia Católica, especialmente después de la visita que hiciera el Beato Juan Pablo II, y subrayó que en Cuba hay valores éticos y morales basados en la imagen de patriotas como el Beato José Olayo, el Padre Félix Varela y nuestro héroe nacional José Martí; recalcando que la Iglesia, en consonancia con estos valores, trabaja en el bienestar de todos los cubanos.
En sus pronunciamientos, Benedicto XVI hizo hincapié en la necesidad que posee la humanidad de tener hombres rectos, de valores éticos y morales que no sean manipulables, en lo cual Cuba tiene progreso, dirigiéndose en estos momentos hacia la renovación y mejoramiento de la nación.
Por su parte, Monseñor Dionisio García Ibáñez, Arzobispo de Santiago de Cuba, visiblemente emocionado, al darle la bienvenida al Papa rechazó la injerencia de otros países en los asuntos propios de Cuba, destacó la necesidad de ver las coincidencias por encima de las diferencias ideológicas, como refiriera nuestro José Martí y dejó claro que debemos trabajar juntos por un futuro mejor, como la única vía segura para el bienestar del pueblo.
Por supuesto que nada de esto gustó a la mafia anticubana y menos aun a sus asalariados internos, pues ambos se quedan sin el esperado apoyo de la Iglesia para sus planes injerencistas al servicio del Imperio, quien sueña con recuperar el dominio económico y político de Cuba, sin entender que todos los cubanos rechazamos el grillete impuesto por los yanquis en 1902 y del que finalmente nos liberamos en 1959 con una Revolución genuinamente cubana, con la participación de todo el pueblo y sin apoyo externo alguno.
Los asalariados del imperio quizás el próximo mes reciban menos dinero desde Miami, porque no pudieron cumplir con sus indicaciones. Los ataques al Vaticano es posible que se intensifiquen, sacándole algunos paños sucios al aire, pero finalmente con altas y bajas, milagros y pecados, se impondrá la experimentada sabiduría de 2011 años que tiene la iglesia católica romana.
El Heraldo Cubano 
Pingback: Servicio a Dios o al imperio |